Muchos niños padecen hoy día de las llamadas "alergias", que no son más que una respuesta defensiva del sistema inmunológico en presencia de sustancias tóxicas, procedentes de alimentos o medicamentos, cuyos componenete químicos son sustancias altamente agresivas que constituyen un factor de alto riesgo para la salud humana. Por tanto la alergia no es más que una alerta del sistema inmune ante la presencia de sustancias nocivas. Para ello gran cantidad de medicamentos son recetados, el costo de los mismos es prohibitivo. Si los padres tuvieran consciencia sobre la ingestión de soda o refrescos en sus hijos reducirían el número de visitas al médico y podrían ahorrar mucho más y gastar menos en medicamentos.
Las sodas contienen cafeína y los niños al igual que los adultos
la consumen en la noche o en la cena, lo que les exita las mucosas y también aumentan los niveles de azúcar en la noche y no es facil lograr un sueño tranquilo.
Al siguiente día nos levantamos como frustrados por no haber dormido bien. Agréguele a esto el descanso de la cena ante el televisor y la influencia de la velocidad de las noticias.
Una cena sin sodas es más sana. Apelar a jugos naturales o agua es lo más sabio y coherente.
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